Golpe para el Girona: Donny van de Beek será baja entre cuatro y cinco meses tras una delicada cirugía
El Girona FC ha recibido un fuerte revés en plena recta final de la temporada. Donny van de Beek, uno de los fichajes más ilusionantes del último año, estará alejado de las canchas entre cuatro y cinco meses tras someterse a una cirugía en el talón izquierdo. La intervención, realizada por el reconocido doctor Ramón Cugat, obliga al mediocampista neerlandés a despedirse no solo de lo que resta del actual curso, sino también de la pretemporada y, posiblemente, del arranque de la próxima campaña.
Van de Beek llevaba varias semanas arrastrando molestias, intentando competir pese al dolor. Sin embargo, el desgaste acumulado y la falta de mejoría obligaron a tomar una decisión definitiva: pasar por el quirófano. El cuerpo médico del club y el jugador coincidieron en que era la mejor opción para garantizar una recuperación sólida y evitar consecuencias a largo plazo.
Desde su llegada al Girona, procedente del Manchester United, el centrocampista de 28 años había logrado ganarse un sitio en el once inicial. Con 35 partidos disputados, tres goles y dos asistencias, su inteligencia táctica y su capacidad para mover al equipo desde el centro del campo se habían vuelto esenciales en los esquemas de Míchel.
La baja de Van de Beek representa un duro golpe para el equipo catalán, que ya afronta una etapa complicada del calendario sin margen de error. Con varios partidos clave por delante, el técnico tendrá que reinventar su mediocampo sin una de sus piezas más experimentadas, en medio de una plantilla que también ha sufrido otras bajas sensibles.
Además de perder a un referente en el vestuario, la lesión del neerlandés abre un interrogante sobre su futuro inmediato en la entidad. Aunque tiene contrato vigente hasta 2028, las constantes interrupciones físicas podrían influir en su rol dentro del equipo a medio plazo. El club deberá evaluar con cautela los pasos a seguir una vez completada su recuperación.
Para Van de Beek, este nuevo obstáculo supone otro capítulo en una carrera que ha estado marcada por altibajos desde su salida del Ajax. Aun así, desde el entorno del jugador aseguran que está motivado para regresar más fuerte y demostrar su verdadero nivel en la liga española.
Por ahora, el foco estará puesto en su recuperación, que se llevará a cabo bajo estricta supervisión médica. El Girona, mientras tanto, debe mantener la concentración y sumar puntos valiosos para evitar sustos en la clasificación. El reto es mayúsculo, pero no imposible.
La afición, que ha recibido con tristeza la noticia, confía en que el equipo podrá afrontar esta adversidad con unidad y carácter. Y esperan, más temprano que tarde, volver a ver a Van de Beek con la camiseta rojiblanca sobre el césped, listo para marcar la diferencia como lo hizo en sus mejores momentos.
